El «manspreading» es la acción de abrir las piernas y ocupar mucho más espacio del que realmente necesitas cuando vas sentado en el transporte público (o en cualquier otro lado). La consecuencia directa es que le quitas espacio a la gente de tu alrededor.
Viene del inglés ‘man’ (hombre) y ‘spreading’ (abrirse, espatarrarse) y no existe el ‘womanspreading’ porque efectivamente y si te fijas el común de los mortales que se abre de patas en el metro o autobús es un míster.
¿Solo pasa en España?
No, claro que no. Puedes leer este artículo de Tribuna Feminista donde aparecen ejemplos de acciones contra el manspreading en, por ejemplo, Turquía.
El manspreading está relacionado con ese ‘man’, que no es casual, porque pasa de aquí y allá y la coincidencia es básicamente esa. Que lo suelen hacer hombres.
Yo no creo que sea para tanto
Tete, Mira a tu alrededor. MIRA LAS FOTOS, POR DIOS.
Yo no hago manspreading
Ya, ya sé que tú no lo haces. Lo hacen otros hombres. Tú fíjate.
¿Las mujeres también hacen manspreading o algo similar?
No. Vamos a ver. El ‘manspreading’ es, al final, un síntoma de una enfermedad mucho mayor. Los hombres ocupan/ocupamos en el espacio público o común como si no hubiese un mañana. Eso hace que otras personas, por ejemplo las mujeres, se vean afectadas por ello; les queda menos espacio a ellas.
Esto se ve fácil si piensas en el fútbol. Aunque hay mujeres aficionadas y que van a ver los partidos, los que la lían, los que van pitando por la carretera, los que petan Canaletas o Cibeles son, en su mayoría, hombres.
Sí que hay quien ha intentado decir «hey las chorbas también ocupan mucho espacio, por ejemplo con su bolso» pero, hombre, no es lo mismo. De hecho, puedes fijarte en los hombres que llevan cubos de pintura o cajas de herramientas o el carrito de cartero: todos ellos ocupan más espacio en el transporte público que alguien que no los lleve, pero ninguno de ellos ocupa más espacio solo porque sí.
Que, al final, es la vaina del manspreading: no hay ninguna razón por la que debamos ir sentados con las piernas abiertas ocupando más espacio en el tren.
Si piensas que una mujer con cuatro bolsas de la compra y un bebé está haciendo lo mismo que tú, que te abres de patas para leer el móvil, es que no estás entendiendo el problema.
Cómo evitar hacer manspreading o despatarre machista
Te dejo aquí el How To:
- Siéntate.
- No abras las piernas como si se acabase el mundo.
¡Y listo!
«Es que tengo testículos y es molesto cerrar las piernas» no se lo cree nadie, ni siquiera otra persona con testículos.